lunes, 20 de julio de 2015

Más Bonita que Ninguna

El mes pasado, en el kiosco de la esquina, vi una toalla-pareo que me encantó y que regalaban con una revista, Telva, para más señas. Así que, pese a que ese tipo de revistas me parecen una tomadura de pelo porque pagas una leña a cambio de un tochaco muy colorido llenito de anuncios de colonias caras y marcas exclusivas, me la compré. 
Y anoche, un mes después, empecé a leerla, a ver si así me entraba el sueño. 
Pues bien, caí en un "reportaje" en el que pretendían instruirnos para ir a una fiesta y que se nos volviera a invitar. 
Lo haré corto. Primero unos consejos útiles tipo...no hagas probaturas raras a la hora de vestirte, una vez allí te puedes arrepentir; las sandalias mira a ver que sean cómodas; no te pases con al maquillaje y menos en verano... 
Y ya, más adelante, lo que me dejó muerta: A saber y por orden cronológico:
1.- El momento crucial de la fiesta es la entrada, así que mira a ver cómo entras para que todas las cabezas se giren y todas las miradas se claven en ti.
2.- Si tu conversación no es medio qué, mejor dedícate a escuchar o, ya puestos, ponte a bailar (y añado yo: no se vayan a dar cuenta de cómo eres cuando te da por abrir la boca), piensa que la pista de baile es un buen decorado en el que llamar la atención cuando no lo consigues con tu oratoria.
3.- Casi más importante que la fiesta en sí es lo bien que salgas en las fotos (así lo decía la revista, lo juro), que la fiesta se inmortaliza luego en las redes sociales y éstas son más importantes, por lo visto, que la vida misma. Por lo tanto, no bajes la guardia en ningún momento y estate pendiente de los flashes.
4.- Y ya, para terminar, la forma en la que te tenías que retirar a casa también era importante, pero para cuando llegué a esa parte, se me estaban cerrando los ojos y no recuerdo qué había que hacer.

Directamente, esta vez no voy a dar mi opinión porque me da hasta pereza. Pero de verdad que vaya tela.


No hay comentarios:

Publicar un comentario